Conservación del suelo

Sin prácticas adecuadas que protejan el suelo, el resultado puede ser un profundo desequilibrio del sistema productivo.

Es preciso analizar todos los problemas, pues no es suficiente con resolver sólo una parte de los mismos.

Promover el equilibrio de los organismos beneficiosos del suelo es un elemento clave en su conservación.

El suelo es un ecosistema que incluye desde los microorganismos, bacterias y virus, hasta las especies macroscópicas, como la lombriz de tierra.

Varios hongos desarrollan micorrizas o asociaciones simbióticas con las raíces de plantas vasculares.

El agua que discurre decapita el horizonte superior del suelo (el más fértil).

Además de frenar un escurrimiento excesivo, estas obras fomentan la infiltración del agua.

Cada tipo de cultivo tiene sus necesidades y muchas veces lo que falta para uno sobra para el otro.

El suelo se abre muy poco haciendo una microlabranza en un surco para la semilla y el fertilizante.

Con esta técnica se promueve la conservación del suelo y de su actividad biológica.

Sementera de millo (maíz) en Liechtenstein .