Sus componentes eran principalmente miembros del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y del Partido Socialdemócrata Independiente de Alemania (USPD), entonces ambos socialistas.El político del SPD Gustav Noske, que se había trasladado inmediatamente de Berlín a Kiel, se puso al frente del movimiento muy virulento en esta ciudad, consiguiendo moderar las peticiones de los sublevados, sirviendo lo que ocurría en esta ciudad como ejemplo, con lo que en gran parte de Alemania la revolución de 1918 se desarrolló pacíficamente.En el congreso nacional que celebraron los Consejos el 16 de diciembre en Berlín, se pidió, entre otros temas, la eliminación de la constitución que regía el ejército, así como la creación de un ejército popular en el que los oficiales serían elegidos por los soldados.Las peticiones de los partidarios del USPD fueron aún más lejos, exigiendo que la nueva constitución debería basarse en estos Consejos, pero no fueron aceptadas.Esta desavenencia acabó siendo el germen de la creación del KPD (Partido Comunista Alemán) bajo el liderazgo de Karl Liebknecht y Rosa Luxemburgo.