El primer Congreso antimasónico de Trento comenzó el 26 de septiembre de 1896 en Trento (capital del Tirol italiano que entonces formaba parte del Imperio austrohúngaro) y fue organizado por la Liga Internacional Antimasónica (en francés: Ligue internationale antimaçonnique), creada en Roma en 1893, y dirigida por el Príncipe de Loewenstein.
El papa León XIII dedicó un Breve al Congreso Antimasónico de Trento.
[1] En la sesión matinal del último día del Congreso, el Comendador Pedro Pacelli —escritor y periodista italiano— presentó una moción de aplauso para el diputado carlista Juan Vázquez de Mella, que presentó a las Cortes de Madrid una vigorosa petición solicitando que sea declarada "ilegal, facciosa y traidora a la Patria" la Masonería, quitando de los empleos públicos a los masones.
El congreso recomendó la publicación de libros y panfletos baratos contra la masonería.
Los Actos del congreso antimasónico international fueron publicados en Tournai en 1897 por el editor francés Desclée.