Confesión de Torgau

Constituye el núcleo de la Confesión de Augsburgo, rechazada dos meses después por el emperador Carlos Quinto.

En 1527 había fundado la Iglesia Evangélica-Luterana de Sajonia (Evangelisch-Lutherische Landeskirche), de la que el mismo se erigió en el primer obispo supremo (oberster Bischof).

Este texto se presentó a finales de marzo al emperador, que convocó la Dieta de Augsburgo en el mes de junio siguiente.

Sin embargo, la redacción de los artículos no convenía a los Philippistes, herederos de la tradición iniciada por Philippe Melanchthon, por lo que rehusaron participar en la votación.

Por ello fueron desde entonces estigmatizados como calvinistas y posteriormente serían expulsados del Electorado de Sajonia.

Fue en estos locales de la antigua Bailía de Torgau donde en marzo de 1530 se redactaron y firmaron las actas de la Confesión.