El año 1302 fue convocado un concilio en Roma por Bonifacio VIII.
Solo se mira como obra de este Concilio la famosa decretal: Unam Sanctam.
Dice el Papa en esta Bula: Se debe distinguir con cuidado en esta Bula el expuesto y la decisión, según reflexiona Mr.
Sin embargo, Bonifacio aunque era tan resuelto, no se atrevió a sacar esta consecuencia que naturalmente se seguía de sus principios y se contentó con decidir en general que todo hombre está sujeto al Papa, verdad de que ningún católico duda con tal que se restrinja la proposición a la Potencia espiritual.
Diccionario portatil de los concilios: que contiene una suma de todos los concilios generales, nacionales, provinciales y particulares .... por D. Joachin Ibarra.