El envío de mensajes interestelares es potencialmente mucho más fácil que el viaje interestelar, siendo posible con las tecnologías y equipos actualmente disponibles.
El proyecto SETI ha estado realizando durante las últimas décadas una búsqueda de señales transmitidas por vida extraterrestre ubicada fuera del Sistema Solar, principalmente en las frecuencias de radio del espectro electromagnético.
Se pensó brevemente que los pulsos de radio regulares emitidos por los púlsares eran potenciales señales inteligentes.
También se han hecho varios intentos para transmitir señales a otras estrellas.
Consistió en un mensaje extremadamente simple dirigido a un cúmulo globular de estrellas en la Vía Láctea, conocido como M13, a una distancia de 30.000 años luz del Sistema Solar.