[7] Así, el general Ricafort salió con sus tropas a reunirse con Valdés en Mito el 9 de abril.
[2] Valdés ordenó a su caballería cargar sobre el enemigo, que les respondió arrojándoles piedras con sus hondas e intentando detenerla con sus picas.
[19] Luego vino la carga de la infantería en guerrilla (formación abierta), abriéndose paso por el camino real y disparando al gentío que se ubicaba en las laderas de los cerros circundantes.
[1] Los vencedores tuvieron unos pocos muertos y heridos,[2] destacando entre estos últimos el comandante Dionisio Marcilla.
[4] El control de la sierra era importantísimo para los monárquicos, así lo había entendido el virrey José de La Serna, pues permitía a las tropas que defendían Lima estar en contacto con los puertos del sur, donde se esperaba un futuro ataque.
[10] Los realistas cometieron el error de reprimir con dureza a los indios, quienes además de odiar los tributos que debían pagar, se sumaron en masa a la causa patriota.