Mariano Ricafort
Comenzó su carrera militar en 1793 sentando plaza como soldado en el ejército que participó en la guerra del Rosellón, donde se destacó hasta ser nombrado subteniente dos años después.[1] En 1815, como coronel del Regimiento de Extremadura, viajó a América en la expedición dirigida por el mariscal Pablo Morillo para sofocar las insurrecciones independentistas de Venezuela y Nueva Granada; desde allí marchó al Perú para incorporarse al Ejército Real del Perú.Combatió en San Agustín, combate que iba a favor de los independentistas, hasta que fue muerto el gaucho Garay, los realistas obtuvieron prisioneros, fusiles, carabinas y lanzas, caballos y otras tantas cabezas de ganado vacuno.Aún no restablecido completamente fue nuevamente herido durante uno de los combates ocurridos en el primer sitio del Callao.[2] Aunque no volvió a servir en el ejército activo sí ejerció altos cargos públicos.[3] Senador por Huesca en la legislatura 1837-38[4] y capitán general de Galicia ese mismo año.