Comandante supremo de las Potencias Aliadas

Comandante supremo de las Potencias Aliadas (en inglés: Supreme Commander for the Allied Powers, SCAP) fue el título que el general Douglas MacArthur recibió durante la ocupación de Japón posterior a la Segunda Guerra Mundial.A pesar de que con anterioridad hubo y en la actualidad hay otros comandantes supremos aliados, el título como tal solo ha sido concedido a MacArthur en toda la historia.Estas acciones hicieron que McArthur fuera visto por muchos políticos y civiles japoneses como el precursor de la restauración del poder imperial en Japón, incluso considerando el que se había restaurado el estilo Shōgun de gobierno,[2]​ el cual había desaparecido desde el comienzo del periodo de Restauración Meiji.MacArthur jugó un papel fundamental en la amnistía concedida al emperador Shōwa y todos los miembros de la familia imperial implicados en la guerra que impidió que fueran perseguidos por la justicia en el Tribunal Penal Militar Internacional para el Lejano Oriente que se constituyó para juzgar a criminales de guerra japoneses una vez terminada la Segunda Guerra Mundial.[4]​ y personal tanto estadounidense como oficiales japoneses colaboraron para prevenir que pudiera surgir a la luz cualquier prueba que pudiera incriminar a cualquier miembro de la familia imperial en crímenes de guerra.
El edificio Dai-Ichi Seimei , lugar donde el SCAP fijó sus cuarteles generales.