Colegiata de San Pedro de Teverga
Por este motivo el edificio conserva elementos de ambos estilos: Se puede indicar que la iglesia es la primera muestra de este estilo en la región.Es probable que la colegiata, como tal, se fundase en 1107, fecha que aparece en el libro "del codo" de la condesa, depositado en el Real Instituto Jovellanos de Gijón.Su interior es muy parco y adusto, con ventanas muy reducidas que dejan pasar poca luz, dado que sus constructores querían erigir un espacio sagrado, apto para la meditación y el ascetismo.Es destacable su vestíbulo, los capiteles de las columnas centrales, el presbiterio, el blasón de la Casa Miranda esculpido en los machones, junto con los sepulcros y varias inscripciones.Otro aspecto decorativo de gran importancia es la escultura del Cristo crucificado, escultura románica datada en el siglo XIII de madera policromada que está situada en su capilla mayor.