[1] El cirujano torácico está especializado en los procesos patológicos que afectan a toda la cavidad torácica, en concreto a los bronquios, costillas, diafragma, esófago, mediastino, pleura, pulmones y tráquea.
Excepto el corazón y los grandes vasos, a la que se dedica la cirugía cardiovascular.
Se relaciona habitualmente con algunas especialidades no quirúrgicas, sobre todo con aparato digestivo y neumología.
El cirujano torácico normalmente ejerce en hospitales, por la necesidad de quirófano y material quirúrgico especializado.
Sus actividades se desarrollan en el quirófano, la sala de reanimación, la planta (donde están los pacientes encamados), y las consultas externa (intra o extrahospitalarias).