También se lo conoce como chile miracielo o parado, y todos estos nombres provienen de la posición vertical que adoptan los chiles, mirando hacia arriba, aun cuando están en la planta.
Al madurar, pasan de un color verde claro a rojo brillante intenso.
En el centro de México, se usa este chile fresco para salsas, adobos, guisos... sin embargo es más conocida su versión seca, llamada chile guajillo.
El 90% de su producción, sin embargo, se da más al norte, el Altiplano Norte (Zacatecas, Chihuahua y San Luis Potosí).
[1] Los chiles mirasol poseen una pungencia que varía de los 2.500 a los 4.000 SHU, es decir, de poco picante a moderado.