Chicoana

La etnia más conspicua que habitó el territorio donde se emplaza la actual Chicoana fue la de los calchaquies (de la rama llamada pulares), asociados a la Cultura Santa María, pueblos sedentarios con estado, agricultura, ganadería de auquénidos (camélidos sudamericanos) y ciudades; entre sus ciudades se contaba precisamente Chicoana.

Durante el siglo XV el territorio fue invadido por los incas al mando de Túpac Yupanqui quedando incorporado al Tahuantinsuyu (Imperio Inca), en esa época Chicoana, con el nombre de Sikuani*, pasó a ser la capital de la "provincia" del Tukma o Tukuman y un nudo de caminos recorrido por el qhapaq ñam o "Camino del Inca" (luego el Camino Real español).

Sin embargo, el territorio no fue plenamente controlado y colonizado por los españoles sino hasta la conclusión de las Guerras Calchaquíes las cuales significaron un secular empeño bélico, concluidas en el siglo XVII tras la debelación de las últimas resistencias de la parcialidad diaguita llamada calchaquí.

Otro gran atractivo turístico: el Embalse Cabra Corral ubicado unos 12 km al sudeste de Chicoana.

El pueblo en sí conserva un aire de otros tiempos con viejas casonas y una plaza muy bien cuidada, es un pueblo gaucho muy fiel a sus tradiciones.

Iglesia San Pablo de Chicoana este edificio de arquitectura colonial, data del siglo XVIII y en su interior ofrece a la vista numerosos cuadros e imaginerías de gran valor artístico e histórico.