Clive Bell, David Garnett y Maynard Keynes vivieron en Charleston durante periodos de tiempo considerables.
La colección incluye trabajos de Auguste Renoir, Picasso, Derain, Matthew Smith, Sickert, Tomlin y Eugène Delacroix.
Juntos transformaron los huertos y gallineros, esenciales para el sustento familiar durante la Primera Guerra Mundial, en un jardín decorativo en el que concurren influencias mediterráneas e inglesas.
Formas clásicas conviven con trabajos a escala natural de Quentin Bell, mosaicos y estanques con bordes alicatados.
Se trata esencialmente de un festival literario en el que han actuado figuras como Jung Chang, Patrick Garland, Stephen Poliakoff, Patti Smith, Sarah Waters y Simon Schama.
La novela Los soldados no lloran (2012), del autor holandés Rindert Kromhout, está ambientada en Charleston.