En junio de 1905 se concretó el reglamento interno que regiría a la Institución.
Se decidió designar al Hospital “Pereira-Rossell”, en honor al matrimonio donante del terreno quitándose el prefijo “de niños”: “…Para que sea destinado en parte a servicios de otra índole…”, de esta forma quedaba explícito en la ley el uso del predio para otros cometidos así como el carácter “…exclusivamente laico y ajeno a toda corporación o secta religiosa”.
En 1915 fueron construidos los pabellones dedicados a la Obstetricia y Ginecología, y después tras una donación del doctor Enrique Pouey se instaló una unidad para radioterapia, finalmente, el 29 de mayo de ese mismo año, es inaugurada la Casa de Maternidad.
[2] En 1937 se construyó el nuevo pabellón, el llamado consultorio anexo “Alejandro Beisso”, destinado a asistencia externa y servicios administrativos.
La propuesta del Sistema Nacional Integrado de Salud plasma la concreción de un proyecto que remite al futuro y que contiene como objetivos fundamentales la universalización al acceso de la salud y mayor equidad, apostando a la calidad en la asistencia y a dotar de mayor sustentabilidad a todo el sistema.