La ceca de Tamusia se enmarca en el contexto del castro vetón de «Villasviejas del Tamuja»,[1][2] cuyos restos arqueológicos se encuentran a unos dos kilómetros al noroeste de la localidad cacereña de Botija.
Tradicionalmente, la existencia de este taller monetario ha despertado un especial interés en lo relativo a dos cuestiones principales: el hecho de que se acuñasen monedas celtíberas en suelo extremeño, lejos de su espacio cultural; y la aparición de una tercera emisión bilingüe, posterior a las dos primeras acuñaciones, ya plenamente celtibérica.
[3] Se han datado estas emisiones a principios del siglo I a. C.[7] o, al menos, durante la primera mitad de la centuria.
[8]