La cauterización también se puede usar para marcar a un humano, ya sea de manera recreacional o forzada.
La cauterización se usaba para detener hemorragias, especialmente durante alguna amputación.
El procedimiento frecuentemente es usado para detener la hemorragia en pequeños vasos sanguíneos (los vasos de mayor tamaño son ligados preferentemente), o para cortar a través de tejido suave por ejemplo grasa abdominal (en una laparotomía) o en el tejido mamario en una mastectomía.
En cambio la estimulación en los nervios y músculos cesa a los 100 000 Hz (100 kHz), debido a que las variaciones son demasiado rápidas para que las células puedan ser estimuladas.
Cuando se usa un electrocauterizador monopolar es importante que la almohadilla de conexión a la toma de tierra sea el único camino por donde la corriente pase a través del cuerpo.
La corriente eléctrica siempre sigue la ruta de menor resistencia, y si esta encuentra camino en alguna pieza conectada a tierra que toque el cuerpo del paciente por casualidad, es posible que ello resulte en una quemadura en esa zona o en la punta de la sonda cauterizadora.
Muchas reacciones químicas pueden destruir tejido y algunas son usadas de manera rutinaria en medicina, comúnmente para remover pequeñas lesiones en la piel o tejido muerto en la hemostasia.
Algunos agentes cauterizantes son: Si una persona presenta sangrado nasal frecuente (epistaxis) puede deberse a que tenga vasos sanguíneos expuestos en su nariz.