La causa lícita es un elemento esencial común y requisito de validez del acto jurídico, y consiste en que la motivación de todo negocio jurídico debe ajustarse a la ley.
[1] El principal elemento de estudio de la causa lícita es su par opuesto: la causa ilícita.
[2] En general, los romanos no conocieron la teoría del acto jurídico.
Se trata de una obra que tiene su origen en la pandectística alemana del siglo XIX.
[3] En Roma, los jurisconsultos se referían a la causa de la obligación, entendiendo por tal la fuente de donde emanaba el vínculo juris, esto es, el contrato, el cuasicontrato, el delito, el cuasidelito: la causa eficiente.