[4][5][6][7] También posee un pequeño museo de arte religioso, localizado en una sala contigua a la basílica,[8] y no se encuentra abierto al público.
Sin embargo, sería recién en 1848-1849 cuando se constituyeran los dos bloques permanentemente enfrentados entre sí durante todo el resto de la centuria: liberales y conservadores.
[12] Los ideales que los dividían podían resumirse en sus consignas, en su actitud con la Iglesia católica, el manejo de la economía y la administración territorial.
[13] Sin embargo, en un país dividido, tratando de resolver sus pugnas partidistas, la Iglesia constituía un elemento aglutinador, lo que la llevó a convertirse en un brazo electoral decisorio.
En 1855, Domingo Antonio Riaño Martínez es nombrado tercer obispo de Antioquia y llegó a su sede en noviembre del mismo año.
[50] En agosto, Crosti presentó unos informes detallados sobre la construcción del edificio, indicando sus costos por partes, donde totaliza $ 286 318 pesos el valor de toda la obra o sea que no llegaban a los $ 400 000.
[61] Para mayo de 1887 el anciano sacerdote José Dolores Jiménez y el señor Guillermo Restrepo Isaza le enviaron un comunicado al obispo Herrera, solicitando «se sirva determinar si es la ocasión oportuna de transmitir a la Iglesia varios derechos que le pertenecen y que representamos por escrituras públicas a nuestro favor».
Primero acudió al destacado arquitecto bogotano Mariano Santamaría, quien descalificó los diseños de Crosti y señaló graves errores en los planos.
[75] En esta última localidad, Marulanda compró una finca para dicho fin, la que a su vez sostenía con la venta de la madera sobrante.
[83] Además, el obispo Pardo se mantuvo al margen y trató, con cautela, que sus sacerdotes no intervinieran en la guerra.
[97] Luego, en el mismo periódico fueron publicados otros ocho artículos de prensa y hasta un poema satírico, que avivaron más la controversia.
Entre los consultados estaba el arquitecto e ingeniero belga Agustín Goovaerts, quien en un medio dijo «las columnas de la catedral están bien dimensionadas; fue un error inicial no desviar la quebrada La Loca; pues ahí es donde podría estar el problema»; y agrega que sin ornamentos, «la Catedral sólo es un montón de ladrillos».
Ese mismo año (1937), monseñor Tiberio Salazar pretendió construir el Palacio Episcopal cerca a la Catedral y al Seminario como fue planeado desde 1871, pero lo convencieron de que era un error, por lo cual no realizó la obra.
[140][141] Además, se tiene planeado renovar el sistema eléctrico del templo pues también tiene décadas sin cambios, siendo ya obsoleto y peligroso.
La fachada principal da la cara al costado norte del Parque de Bolívar y es quizás el frente con más rasgos románicos.
[160] Cuando el altar mayor fue instalado, tenía unas gradas para los candeleros, un Sagrario con su manifestador o expositorio y a cada lado un ángel portacandelabro.
Toda la cátedra está adosada al pilar noroccidental del crucero, y puesta sobre el pavimento de mármol.
El central está colocado en forma de U, las partes laterales pegan con los pilares ubicados al norte del crucero.
[116] Todos los teclados están dispuestos en una consola, la cual está separada y puesta delante del órgano con vista a la nave central.
Estos fuelles se encargan de regular la cantidad y la presión para que el órgano no suene desafinado.
Los primeros confesionarios que tuvo la catedral se elaboraron en madera, fueron un total de 14,[159] y los realizó por el maestro Luis Arenas.
Al principio, fue difícil encontrar quien diseñara las grandes lámparas, señalar la altura a que debían situarse y el tipo de bombilla.
La colocación la dirigió el padre Lucas José Vásquez, ecónomo de la Catedral, con base en un plano donde venían numerados para formar diversas figuras.
El obispo José Joaquín Isaza Ruíz fallecido 1847, fue enterrado en La Candelaria, donde se construyó una tumba en la nave lateral que da con la calle Boyacá frente a la cúpula.
En él se guardan los objetos que son necesarios para las celebraciones religiosas, como por ejemplo hostias sin consagrar, cálices, casullas, etc., y es de paso restringido al público en general.
[200] La catedral posee varias esculturas, algunas están permanentemente expuestas en diversos puntos del templo y otras solo se exhiben en épocas especiales como en el mes de diciembre o en la Semana Santa.
La custodia fue realizada por la afamada Maison Placide Poussielgue-Rusand (París) y representa un gran trabajo de la orfebrería francesa del siglo XIX.[n.
Todos estos elementos en conjunto terminan formando una estrella de 10 puntas, la cual en la parte superior remata con una cruz engastada con diamantes, esmeraldas y rubíes.
Entre los medallones se encuentran engastadas cuatro rubíes y hojas de acanto, adornando el fuste también venos cincelados algunos motivos florales.
comenzó a construir búnkeres y silos durante la Guerra Fría, Mosler se convirtió en el contratista de las puertas blindadas.