Castro de El Cincho

Este pueblo de cultura celta o celtíbera fue, junto a los astures, el último pueblo de la península ibérica que fue conquistado por el imperio romano (durante el período transcurrido del año 29 a. C. al 19 a. C., conocido como las Guerras Cántabras, Bellum Cantabricum et Asturicum).

Igualmente, se ha registrado y verificado una segunda línea de muralla que refuerza el sistema defensivo del castro, localizada en el flanco más desprotegido.

Perteneció a una tribu cántabra (grupo étnico o populi que habitó la cuenca del río Besaya y fue generadora de las famosas estelas discoideas), ya que como sostienen sus investigadores el enclave arqueológico puede ser considerado un castro de castros.

Los vestigios recuperados son de muy variada tipología: industria lítica, cerámica a mano, elementos metálicos, etc. Un notable hallazgo es un molino giratorio con clavija, del que se conservan las dos valvas pertenecientes a un descubrimiento realizado por el escultor Jesús Otero, en 1953.

[5]​ Una pieza muy especial que destaca por su relevancia es la manilla de un escudo[6]​ (scutum o caetra).

La cronología de este objeto se puede enmarcar entre los siglos VI a III a. C. (Segunda Edad del Hierro) según los paralelos hallados en la península ibérica.

Fotografía aérea en la que se puede observar las dimensiones del enclave fortificado, así como los restos de las antiguas fortificaciones defensivas. [ 1 ]
Vista aérea de drone del lomo de la muralla principal.
Sondeo 2 del castro de El Cincho, Yuso (Santillana del Mar). Vista de las murallas superpuestas y el lapiaz desnudo.