Castilhismo

Era un grupo político fuertemente conservador, pero al mismo tiempo apostaba por la modernización económica, ya que tenía sus bases de apoyo en la burguesía industrial y urbana.

Júlio de Castilhos fue elegido presidente de Río Grande del Sur en 1891 cuando instituyó la constitución del estado redactada por él mismo y aprobada casi sin cambios por lo que fue apodada la constitución "castilhista".

[2]​ El castilhismo tenía tres principios básicos: En otras palabras, para Castilhos, el bien público se basa en la completa reorganización política y administrativa del Estado, a la luz del principio de "conservar mejorando".

En este concierto, el bien público sólo sería alcanzado por un líder virtuoso que, al frente de un Estado fuerte, estableciera la completa reorganización político-administrativa del Estado, la prosperidad material y una educación cívica moralizadora.

El progreso moral e intelectual se alcanzaría mediante un orden dictatorial, a través de la acción del Estado.

El castilhismo se mantuvo como fuerza hegemónica en Río Grande del Sur ininterrumpidamente entre 1893 y 1937.

[6]​ Inicialmente con alcance sólo local, los castillhistas expandieron su influencia a nivel nacional proyectando nombres como Pinheiro Machado, Borges de Medeiros, Flores da Cunha, Lindolfo Collor, Góis Monteiro, Osvaldo Aranha y Getúlio Vargas.

Júlio de Castilhos, creador y principal teórico del castilhismo