En el segundo nivel se alternan ocho tableros con ocho balcones, quedando al centro, sobre la entrada principal, el escudo de la familia Ovando y Villavicencio.
En el tercer nivel se repite el juego alternado de tableros y ventanas.
Y lo más llamativo: formados con mosaico de azulejo, dieciséis figuras antropomorfas presentadas en un momento que detiene sus movimientos.
Fue restaurada por el arquitecto Ambrosio Guzmán en 1987, quien fungió como primer director del Museo Universitario.
[5] Una de las versiones más elaboradas para el significado de las figuras de la fachada se debe al investigador Erwin Walter Palm quien afirma en un análisis muy documentado que la fachada presenta –en un relato densamente sincrético– en la parte superior, una fiesta en la que gente baila acompañada de música la alegría porque Hércules ha dado muerte a la serpiente; y, en el nivel intermedio, los Cinco Sentidos –presentados por los animales que portan algunos de los personajes– dan la bienvenida a Hércules liberador.