[1] Al comenzar la guerra y quedar dividida la península, el bando franquista se encontró con que la mayoría de la industria cinematográfica había quedado en territorio republicano, estando en poder nacional sólo los equipos con que se rodaban El genio alegre, en Córdoba, y Asilo naval, en Cádiz.
Con esa precariedad de medios se buscó rápidamente infraestructura en Lisboa, Berlín y Roma.
José ira allí a verla, y mientras Carmen canta, otra mujer roba el clavel que la gitana ha regalado al Dragón.
José deberá entonces cumplir una penosa orden: llevar detenida a Carmen al cuartel.
Comienza así una nueva vida como prófugo, pero pronto será herido por una partida de Dragones.