Entregó su fortuna y dejó de lado su profesión para combatir junto a Eloy Alfaro.
Más tarde, Concha encabezó una revuelta contra el gobierno de Leonidas Plaza, para vengar la muerte del Viejo Luchador.
[2] Perteneció a una familia acomodada, lo que le permitió realizar sus primeros estudios en Guayaquil, para luego continuar con los estudios secundarios y finalmente empezar a realizar los primeros cursos de medicina en Estados Unidos.
Posteriormente viajó a Europa y recorrió Francia e Inglaterra, lugares donde aprendió francés e inglés, hasta llegar a Alemania donde culminó sus estudios y obtuvo el título de Doctor en Odontología.
Cuando regresó a Guayaquil en 1882 puso consultorio y ejerció la odontología por escasos meses, sin mucho interés, en la calle del Teatro n.º 146, pero terminó por vender el instrumental traído de Europa al colombiano Germán Lince Lalinde.
Pero los gobiernistas contraatacaron al mando del Coronel Ricardo Cornejo Naranjo y se sucedieron cruentos combates los días 3, 16, 21 y 23 de mayo, retirándose finalmente Cornejo por la falta de apoyo popular.
En agosto entró triunfador de Cuenca y dio una soberana paliza al Mayor Estrella, que nueve años antes había intervenido en el fusilamiento de su hermano Luis Vargas Torres.
Luego asistió como diputado por el Azuay a la Asamblea Nacional reunida en Guayaquil, contribuyó a redactar la Constitución que estableció el laicismo y formó, parte de las Comisiones de Guerra, Agricultura y Obras Públicas.
En lo personal ayudó a los Salesianos desterrados y le hizo más llevadero su confínio político en Esmeraldas al Dr.
Leonidas Plaza prefirió mantenerse alejado de la política, pero en 1904 volvió a la lucha y representó a Esmeraldas como diputado en el Congreso Nacional, donde combatió los abusos del régimen y participó en las deliberaciones para dictar la Ley de Cultos.
Para las elecciones presidenciales de 1911 como siempre, estuvo en el ala radical del liberalismo ecuatoriano, apoyó a Flavio Alfaro que triunfó ampliamente en Esmeraldas por 841 votos contra 2 del oficialista Emilio Estrada y 4 de Alfredo Baquerizo Moreno.
Concha se parapetó varias horas en la torre de esa iglesia disparando sin cesar.
Un mes más tarde fue nuevamente capturado en Guayaquil, pero como no se le pudo comprobar ningún delito, el gobierno del Gral.
Pocas semanas más tarde escapó hacia Esmeraldas destruyendo los alambres telegráficos para evitar su captura, pero nuevamente fue detenido y esta vez conducido al Panóptico de Quito, donde más tarde se le siguió un Consejo de Guerra que lo condenó a seis meses de prisión, pero apeló ante la Corte Suprema Marcial y obtuvo su libertad gracias a su defensor el Dr. Luis Felipe Borja hijo Después regresó a Esmeraldas donde el 24 de septiembre de 1913 encabezó un nuevo levantamiento armado contra el régimen del Gral.
En Chiriacu lo recibió modosamente Plaza y le pidió el cese de fuego pues la revolución continuaba en la selva dirigida desde la hacienda Mútile por Enrique Torres Concha, hermano del caudillo.