Carlo Poerio

[1]​ Hermano de Alessandro Poerio, junto a él y su padre, Giuseppe, tras las revoluciones de 1820 se exilió en Toscana, en Francia y en el Reino Unido.[2]​ Restaurado en 1849 el gobierno absoluto, fue condenado a veinticuatro años de cárcel con aislamiento total, pero cumplió solo diez en la torre situada en Montesarchio, porque en 1859 su pena fue conmutada por la deportación.Sin embargo, la nave que lo transportaba a América junto con otros sesenta y siete prisioneros (entre ellos Luigi Settembrini y Sigismondo Castromediano) fue secuestrada en Irlanda por el hijo de Settembrini, desde donde posteriormente reparó en Piamonte.[1]​ El rey Víctor Manuel II lo nombró lugarteniente general de la Italia meridional, pero posteriormente Poerio rechazó el ministerio ofrecido por Cavour y se retiró, decepcionado con la escena política, concuyendo su vida en la pobreza.[2]​ Poerio está enterrado en una capilla del cementerio de Pomigliano d'Arco, declarada en 1930 monumento nacional por el rey Víctor Manuel III.