Fue un importante precursor de las exposiciones antropozoológicas y fundador del zoológico Tierpark Hagenbeck en 1907.
[3] En 1874, se decide a exhibir seres humanos, comenzando con: samoanos y lapones, como "poblaciones puramente naturales", con sus tiendas, arpones, trineos, así como una manada de caribúes.
[3] En 1876, envía un colaborador a Sudán para traer animales salvajes y personas de la nación Nuba.
[2] Así, podía ofrecer a sus espectadores una mirada más real de la forma en la que vivían estas personas.
Hagenbeck creía que debía ser una especie de dinosaurio, similar a un brontosaurio, y lo buscó sin éxito.
Su afirmación fue noticia en periódicos de todo el mundo y ayudó a lanzar la leyenda del mokele-mbembe.