Cultura capsiense

En ella se aprecia una aportación étnica del tipo racial mediterráneo, representada por el Hombre de Aïn Dokkara o de Chacal, probablemente mezclado con cromañoides locales.

Aunque el periodo aceptado para esta cultura abarca entre el 10.000 a. C. y el 6.000 a. C., su presencia no está acreditada hasta el 6.800 a. C., mucho después de las últimas manifestaciones ibero-mauritanas, mientras que los últimos hallazgos están fechados hacia el 2.700 a. C.[1]​[2]​ El periodo capsiense se inició en el área central de Túnez, en la zona de Gafsa (la antigua Capsa), sin llegar nunca a la costa, así como en la región argelina de Tébessa, y hacia el Oeste hasta Uled Yellal, con algunos indicios en el norte del Sáhara.

Las formas geométricas microlíticas se obtenían mediante el golpe del microburil.

El capsiense evolucionado abandona el utillaje de gran tamaño, y sus utensilios son extremadamente variados: perforadores, puntas, buriles, etc.

Es la cultura capsiense la que introduce el arte en el Magreb, con objetos muebles y grabados rupestres, siendo muy notables las plaquitas grabadas y los fragmentos de huevos de avestruz decorados, del periodo evolucionado, que alcanzan su apogeo en el periodo Neolítico, en el oeste y la zona sahariana.

Mapa de las áreas de extensión de las culturas norteafricanas en el Neolítico