A cambio, Cisneros construyó un hospital y un santuario en un lugar más céntrico de la localidad.
[3] En el santuario se colocó la Virgen de la Caridad, que le dio nombre al templo.
También fue visitado por la reina consorte, la princesa Juana, así como duques, condes y miembros de la corte.
El Greco también realizó el cuadro de San Ildefonso, que se conserva en este templo.
[3] Enriqueta Harris estudió la decoración de la capilla y a ella se debe la propuesta sobre como debían estar situados los cuatro cuadros del Greco en la misma.