Campamento de Maghazi

El agua potable del campamento la suministra la empresa israelí Mekorot.[2]​ Hay un centro de salud organizado por UNRWA que atiende unas 8.800 visitas al mes.Fue reconstruido en 1992 gracias al apoyo de Australia y añadió una clínica dental en 1995.[2]​ Maghazi tiene tres escuelas de educación primaria y 2 institutos dirigidos por UNRWA.En 1998, UNRWA proporcionaba servicios educativos integrados a 1.264 niños con discapacidad.Hay también una serie de actividades para los jóvenes que incluyen atletismo, programas sociales y culturales.Salameh Abdul-Karim Salem abu-Rawida tenía 17 años y Omar Adnan Ali al-Raghudi tenía 16, y ambos se dirigían a buscar trabajo a Israel.Su madre y uno de sus hermanos resultaron heridos en el mismo ataque.Algunas de dichas explotaciones estaban cerca del muro de separación entre Gaza e Israel, en una zona que el ejército israelí fumiga a menudo con herbicidas para facilitar sus operaciones, mientras que otras se hallaban tierra adentro.[27]​ Los refugiados en el campo se enfrentaron a epidemias de enfermedades, bloqueos que impedían la importación de alimentos, agua y productos sanitarios, y bloquearon el acceso a los vertederos.Dos de sus siete pozos fueron bombardeados, mientras que los demás quedaron inoperables porque no se pudo importar combustible.Amnistía Internacional ha explicado que estas acciones constituyen los crímenes de guerra de destrucción arbitraria y castigo colectivo, y ha pedido que se abra una investigación internacional al respecto.