Su población supera los 18 000 habitantes, que viven repartidos por el núcleo urbano y varias urbanizaciones, entre otras El Farell, que fue construida en una montaña a una altitud de más de 800 metros.
Los romanos ya aprovecharon esta agua y construyeron allí un balneario que en parte se ha conservado hasta nuestros días.
Sirve para combatir la artritis, fracturas etc. Existe en Caldas el museo de Manolo Hugué, un escultor importante del siglo XX y mejor amigo de Picasso cuyo talento fue ayudado a crear por Manolo.
Al margen del casco antiguo se encuentra la iglesia parroquial de Santa María cuya construcción empezó en 1589 y finalizó en 1714.
Su portada se considera como una de las mejores obras del barroco catalán.
También son interesantes las columnas salomónicas, diseñadas por el escultor francés Pere Ruppin.