El CA-125, un marcador tumoral, se encuentra con frecuencia elevado en estos casos, aunque no es un marcador útil en la evaluación del progreso de la terapia después de realizado el diagnóstico.
Las características patológicas microscópicas determinan si el tumor epitelial en cuestión es benigna, sospechosa o maligna, fundamentado en la evidencia de invasión del estroma u otras características de malignidad.
Los tumores mucinosos se parecen en varios aspectos a los serosos, aunque son menos comunes, tomando un 25% de todas las neoplasias del ovario.
Se caracterizan por tener una apariencia quística de tamaño variable, raramente ocupan la superficie del ovario como la hacen los serosos.
Los tumores mucinosos benignos se caracterizan por tener células epiteliales columnares altas con mucina atípica y no son ciliados, muy similares a las células epiteliales del cuello uterino o del intestino.
Los tumores malignos mucinosos contienen patrones más sólidos con las características malignas, es decir, atipia celular y estratificación, pérdida de la arquitectura normal del tejido y necrosis.
Son producidas por glándulas tubulares que se asemejan mucho al endometrio normal o maligno.
Se parecen a los otros tumores epiteliales, con áreas sólidas y quísticas.
Los tumores sospechosos tienen un complejo patrón de ramificaciones que invaden al estroma.
Los tumores malignos tienen glándulas invasivas coronadas por células atípicas y con frecuentes mitosis en curso.