El cáncer de tráquea, o neoplasia traqueal primaria, es una patología poco común, pero que usualmente es maligna en adultos y benigna en niños.
Tercero, los carcinomas quísticos adenoides, y otros tumores benignos, crecen tan lentamente que tardan mucho en aparecer los síntomas.
[4] Un TAC puede facilitar la detección temprana del cáncer, su grado y el patrón de invasión.
La imagenología revelaría si el cáncer es localizado o si tiene metástasis, lo que ayuda a decidir el tipo de tratamiento.
[5][6] La evaluación por broncoscopía provee la oportunidad de visualizar directamente la masa y extraer una biopsia del tejido.
Además, aunque el carcinoma quístico adenoide es menos radiosensible, la radiación se asocia con mejores resultados y menores tasas de recurrencia.
En los candidatos no quirúrgicos, la radioterapia se considera la primera línea de tratamiento y es una opción paliativa en la enfermedad avanzada.
[10][11] La quimioterapia basada en cisplatino se utiliza en combinación con la radioterapia en enfermedades no resecables o después de la cirugía.