Bronces de Botorrita

La riqueza escritural de esta ciudad puede ser debida a condiciones sociales (ser centro jurídico de la zona) o bien condiciones fortuitas (lugar donde algún desastre bélico rápido impidió la posterior reutilización del bronce cuando ya no era útil).

Y entre el texto latino (Botorrita II) y Botorrita I hay semejanzas estructurales debidas a ser dos textos legales que un grupo de personas imponen.

Francisco Beltrán Lloris apunta las dificultades del razonamiento de Villar y Jordán, puesto que ni Salduie ni Alaun son ciudades belas (ver Bronce II).

El llamado bronce de Botorrita I o gran bronce de Botorrita fue encontrado en 1970 y es el texto en celtíbero más extenso que se había hallado hasta la fecha.

Parece ser algún tipo de documento legislativo aparentemente emitido por un senado local.

No obstante, algunos autores proponen que la lectura correcta sería kentis (en lugar de bintis), 'hijo' en celta, lo cual concordaría más con el contexto.

Recoge, en veinte líneas, un pleito entre los habitantes de Salduie (actual Zaragoza) y Alaun (actual Alagón), por una canalización de aguas que querían realizar los primeros; los alavonenses se consideraron perjudicados y las partes acordaron encomendar el fallo a neutrales (los magistrados de Contrebia Belaisca, Botorrita), que dieron razón a los saluienses.

Todo ello previo conocimiento y con la sanción aprobatoria del procónsul romano, Cayo Valerio Flaco.

Sean jueces quienes del senado contrebiense se hallaren presentes.

Si la ciudad-estado sosinestana fue por donde los salluienses, recentísimamente, amojonaron (terrenos) de manera oficial –de cuyo asunto se litigia–.

En tal caso, si así resulta probado, sentencien estos jueces que los salluienses pueden hacer la canalización con pleno derecho.

Sanción gubernamental romana (línea 14) sancionó aprobatoriamente este procedimiento judicial Cayo Valerio Flaco, hijo de Cayo, general en jefe (=procónsul de la provincia Hispania Citerior).

), en los idus de mayo, siendo cónsules Lucio Cornelio (Cinna) y Gneo Octavio.

Han aparecido, en el proceso, aún inconcluso, de restauración unas anotaciones minúsculas, bajo las palabras BALAISCAE y EIDIBUS, entre las que resultan legibles una D algo separada de dos XX juntas, pero casi con seguridad existen otros signos en ese registro, que se ignora si podrán ser leídos por completo.

En cuatro columnas se registran 254 personas, de las que, al menos, 27 corresponden a mujeres.

Como consecuencia, no existe posibilidad de datación estratigráfica aunque se ha datado entre finales del siglo II y comienzos del I a. C. por relación a los demás bronces en Contrebia y por la escritura empleada.

Tras su estancia en diversos depósitos, fue finalmente entregado en el 2001 al Museo de Zaragoza, dónde se encuentra actualmente.

Está grabado a ambos lados en alfabeto ibérico y el texto es en lengua celtíbera.

Bronce de Botorrita I en el Museo Provincial de Zaragoza . El bronce superior es el auténtico, el inferior es una copia.