La hembra emite un lamento fuerte, estridente, durante la estación de apareamiento para atraer machos.
En Costa Rica, se le conoce también con los nombres de perica ligera o cúcula.
La razón y el mecanismo detrás de este comportamiento han sido debatidos durante mucho tiempo entre los científicos.
Existen al menos cinco hipótesis: 1) fertilizar árboles cuando las heces se depositan en la base del árbol;[6] 2) cubrir las heces y evitar la depredación;[7][8][9] 3) comunicación química entre individuos[10] 4) recoger nutrientes traza en sus garras, nutrientes que luego son ingeridos[11] y 5) favorecer una relación mutualista con las poblaciones de polillas de su pelaje.
[11][9] Más recientemente ha surgido una nueva hipótesis, la cual presenta evidencia en contra de las anteriores y propone que todos los perezosos actuales desciendes de especies que defecaban en el suelo, y simplemente no se ha dado suficiente presión selectiva para abandonar ese comportamiento, ya que los casos de depredación al defecar son en realidad muy escasos.
[12] Exclusivamente herbívoro, su alimentación comprende en su mayoría hojas jóvenes,[13] brotes, retoños, y en algunos casos frutos.