Constó del cerco y del bombardeo de la ciudad, así como un asalto anfibio contra el puerto mismo entre junio y julio de 1797.
A principios de junio la ciudad fue bombardeada, pero las baterías, la marina y la ciudad sufrieron pocos destrozos.
Nelson tenía por objetivo obligar al almirante español José de Mazarredo a que saliera del puerto con la flota española.
Mazarredo preparó una respuesta inteligente y los españoles comenzaron a construir cañoneros y barcos para proteger la entrada al puerto.
[6] Sin embargo, el bloqueo naval duró hasta la firma del Tratado de Amiens en 1802.