En 1854 apoyó la Vicalvarada y en 1856 fue nombrado gobernador militar de Madrid.
Después fue destinado a Filipinas y el Norte de África, afiliándose en aquellos años al Partido Progresista.
En 1866 apoyó los intentos golpistas del general Juan Prim y participó activamente en la sublevación del cuartel de San Gil y en la revuelta de los Pirineos de 1867, razón por la que tuvo que exiliarse.
Entonces se incorporó al Partido Republicano Democrático Federal y fue elegido diputado por Ronda en las elecciones generales de 1869.
XXVIII), describió los sucesos, a los que asistió impasible Pierrad: