Fundada por Charles Beyer, Richard Peacock y Henry Robertson, la compañía operó durante más de un siglo (desde 1854 hasta 1966), exportando a países de todo el mundo sus locomotoras y las máquinas herramienta necesarias para darles mantenimiento.
Richard Peacock había sido ingeniero jefe del taller de locomotoras del Ferrocarril de Mánchester, Sheffield y Lincolnshire situado en Gorton, cuando renunció en 1854, confiando en su capacidad para obtener pedidos para construir locomotoras.
Poco después, sin embargo, Geach murió, se retiró el préstamo y casi todo el proyecto colapsó.
[1] No fue sino hasta 1883 cuando la compañía se constituyó como una sociedad limitada privada, y cambió su nombre al de Beyer, Peacock & Co Ltd.
[nota 2] El sitio fue elegido porque el suelo era más barato que en la ciudad, permitiendo un amplio espacio para expandirse, y había un buen suministro de agua desde un embalse propiedad del FMS&L.
En la fundición, Beyer desarrolló las máquinas herramienta necesarias para construir locomotoras; de cuyo diseño y producción se encargó.
Entre 1864 y 1886, se construyeron 148 unidades para varios ferrocarriles; que funcionarían en su mayor parte hasta la electrificación de las líneas en 1905.
Beyer lo había invitado a Inglaterra en 1861, y lo contrató durante el primer año para trabajar en los talleres de la compañía como dibujante bajo su dirección.
[1][4] Un diseño de locomotora articulada que se hizo famoso en el siglo XX fue otra innovación, la locomotora articulada Beyer-Garratt (genéricamente conocida simplemente como "Garratt"), inventada por Herbert William Garratt, a quien se le otorgó una patente en 1908.
Sin embargo, British Railways finalmente decidió adquirir locomotoras diésel-eléctricas, dejando a Beyer & Peacock en una delicada situación.