Estudia en la Universidad de Turín, siendo doctor en matemática a los 21 años.
Y, en 1928, en la Universidad de Bolonia, que en 1951 lo designa emérito.
Publicó numerosos artículos y libros de altísimo nivel académico sobre temas de matemática, física, historia, filosofía y didáctica.
En 1938, por ser judío, es expulsado de la universidad, perdiendo todos sus cargos.
Junto con Santaló se destacan un grupo de rosarinos: Simón Rubinstein, Juan Olguín, Enrique Ferrari, Fernando y Enrique Gaspar y, posteriormente Mario Castagnino.