Batalla de Pavía (1512)

La victoria se saldó con la derrota francesa, cuyo ejército abandonó el Milanesado, siendo restaurado a la cabeza del ducado el desposeído Maximiliano Sforza.

[2]​ El ejército francés al mando del señor de la Palice, compuesto por 8.000 infantes y 800 caballos, se va retirando del Veronese y desaloja las plazas que ocupan en el Véneto, dirigiéndose hacia el oeste, hacia Lombardía, con el objetivo de hacer resistencia en Pontevico en el cruce sobre el río Oglio.

Aunque los franceses empiezan a construcir una fortificación, la artillería veneciana les hace desistir.

El cruce del ejército de la Liga se complica al casi romperse el puente tendido al paso de la artillería, cuyo cruce se posterga, retrasándose toda la marcha dos días.

Los franceses lo defienden con caballería, y la infantería suiza e italiana ha de retirarse.

La guarnición de Brescia no tardó en pedir salvoconducto para abandonar la ciudad que retenían.