Basilisco (criatura mitológica)

El basilisco[1]​ (del latín basiliscus, y este del griego βασιλίσκος basilískos: 'pequeño rey') era un ser fabuloso creado por la mitología griega que se describía como una serpiente gigante cargada de veneno letal y que podía matar con la simple mirada, que consideraban el rey de las serpientes.

Su influencia era tan nociva que su aliento marchitaba la flora del entorno y resquebrajaba las piedras.

Esto sucede ya que el Basilisco exhala fuego, seca las plantas y envenena las aguas.

Se dice que quien mirara a los ojos de un basilisco, moriría y si lo veía por un reflejo quedaría petrificado.

Hasta el siglo I d. C., es visto como una serpiente excepcionalmente dañina, pero físicamente no difieren mucho de otros ofidios.

Plinio el Viejo hace probablemente sea la mención más famosa de la bestia en su Historia Natural, repetida hasta la saciedad por autores posteriores, muchas veces malinterpretada o tergiversada.

Solino y Claudio Eliano hablan del monstruo en el siglo III.

A lo largo de la Edad Media, en Europa son comunes los bestiarios, la mayoría copias adulteradas.

En 1230 Bartolomé Glanvilla, conocido como Anglico, publicó De Proprietatibus rerum,[5]​ la Historia Natural más popular del Renacimiento.

Durante el siglo XVI se acepta ampliamente la existencia del basilisco y lo verídico de sus propiedades, por lo que sabios y doctores se dedicaban a filosofar sobre el porqué de su veneno visual o la lógica por esta bestia.

El último naturalista que mezcla animales reales e imaginarios es Jan Johnston y su Historiae Naturalis.

No obstante, el vulgo siguió creyendo en esta sierpe y en sus malignas propiedades durante al menos otro siglo más.

[8]​ Se hace una abundante mención del basilisco en todo tipo de autores castellanos en verso y prosa.

Basilisco, xilografía de Jost Amman. Historia natural de animales ficticios (1584).
Representación de un basilisco como se describía en la Antigüedad.
Dos basiliscos cruzando sus cuellos en un capitel del siglo XV .
Imagen de un basilisco, procedente de « Monstrorum historia » (1642), de Ulisse Aldrovandi
Grabado de una comadreja luchando con un basilisco, en forma de gallo con cola de reptil, del siglo XVII .
Estatua de un basilisco en el castillo de Trsat, Rijeka , Croacia .