Basílica de Sant'Abbondio

Tras un viaje a Roma, Amancio trajo algunas reliquias de los apóstoles Pedro y Pablo y para ellas hizo edificar una nueva iglesia, más allá del río Cosia, a lo largo de la Via Regina.Esa basílica sirvió de sede a la cátedra episcopal desde 1013, cuando el obispo Alberico —entonces canciller del emperador Enrique II—, trasladó la sede al interior de los muros de la ciudad, hasta el 1017.Luego, el edificio fue confiado a monjes benedictinos, quienes entre el año 1050 y 1095, reedificaron la iglesia con un estilo románico, con cinco naves y la dedicaron al sucesor de Amancio.El sentido de altitud y verticalidad se da también por los dos campanarios gemelos colocados en la zona del ábside, distribución común en la zona renana pero rara en Italia.Bajo el altar mayor se conservan las reliquias de san Abondio.
Fachada de la basílica de Sant'Abbondio.
Frescos del ábside.