La triple protección de este espacio natural busca preservar sus valores naturales, de gran valor paisajístico y faunístico, en el que destaca la presencia de aves como el buitre leonado, la cigüeña negra, el halcón peregrino, el alimoche, la chova piquirroja, el búho real, el águila real y el águila perdicera.
[3] Su primer emplazamiento estuvo situado a medio kilómetro del actual, en el lugar que hoy se llama «El Castro o Alto del Carrasco», donde se han encontrado algunos restos de cerámica.
El edificio posiblemente fuera de época románica, pero ha tenido diversas reformas a lo largo del tiempo.
Es de planta rectangular, ligeramente más ancha que la cabecera, y con espadaña a los pies.
Está dividida en tres tramos con arcos de medio punto ligeramente apuntados.
Cuenta con añadidos en los laterales del crucero, el coro y sacristía, aprovechando los espacios entre contrafuertes.