En el Antiguo Testamento, la Torre de Babel era un gigantesco ziggurat cuya construcción perseguía alcanzar el cielo.
Alternativamente, el nombre podría estar inspirado en el pez Babel, un animal ficticio descrito por Douglas Adams en 'Hitchhiker' Guía a la Galaxia', los cuales pueden entender cualquier lengua y traducirlo al oyente si está insertado al canal de oreja.
En 2008, Kizoo Technology Ventures y IBB se convirtieron en los primeros inversores de Babbel.
Luego, en 2009, el Fondo Estructural Europeo del FEDER otorgó a Babbel aproximadamente un millón de euros.
[5] Más tarde ese año, una tercera ronda de financiación dirigida por Scottish Equity Partners recaudó otros $ 22 millones.
Otros participantes en esta ronda son los inversores anteriores Reed Elsevier Ventures, Nokia Growth Partners,[6] y VC Fonds Technology Berlin.