Poco tiempo después la DAC concede la autorización para que vuele 3 veces al día en la ruta Quito–Guayaquil.
A finales del mismo año amplía sus rutas mediante la concesión para volar a la Isla de Baltra en Galápagos convirtiéndose en la primera empresa aérea privada que opera esta ruta con 5 vuelos semanales.
En junio del 2004 incorpora una nueva aeronave Boeing 737-200 con capacidad para 129 pasajeros y un mes después suman un tercer avión de las mismas características para cubrir la ruta Quito-Cuenca.
Tras esa concesión, adquiere tres aeronaves más con lo que su flota pasa a contar con nueve aviones.
En esos momentos adquirió VIP Ecuador, una aerolínea chárter por aquel entonces propiedad de Synergy Group (accionista mayoritario de Avianca Group), que sólo volaba a cuatro destinos nacionales en ese momento (Quito, Manta, El Coca y Lago Agrio) con aviones Dornier 328.