Avenida Miraflores (Sevilla)

Este cortijo o hacienda constituía una villa rural de uso agrícola que tiene su origen en el siglo I en época romana, que probablemente tuvo también uso en el periodo almohade y del que se tiene referencias desde mediados del siglo  XVI.

A partir de finales del siglo XIX y principios del XX, se fueron estableciendo en las inmediaciones de la avenida, industrias diversas, que concentraban un amplio porcentaje del tejido industrial de la época.

El conjunto está integrado por 300 viviendas unifamiliares y cuatro manzanas de viviendas colectiva (protegidas urbanísticamente en la actualidad)[5]​ y en su origen fue proyectada como modelo de barrio ejemplar con calles amplias que favorecían la ventilación y contaba originalmente con edificios para biblioteca, guardería, economato, tiendas, almacén de mantenimiento, dispensario médico, iglesia, colegio y piscinas.

[6]​ Las viviendas se ofrecían en alquiler con opción de compra y los candidatos debían cumplir tres requisitos: "ser padre de familia", "ser buenos cristianos" y "no tener relación con los promotores".

Hoy en día la actividad industrial ha desaparecido casi por completo, aunque quedan algunos vestigios de los edificios que la albergaban.

Vista edificio de la antigua fábrica de seda de Santiago Pérez en la avenida Miraflores