[5] La primera noticia que se tiene de unos astilleros en la ciudad data del siglo I a. C., cuando tuvo lugar la guerra civil entre Pompeyo y Julio César:[6] Aunque no sabemos su ubicación.
Fernando III, rey de Castilla y León, conquistó Sevilla a los musulmanes en 1248.
Estas naves se comunican lateralmente a través de gruesos arcos ligeramente apuntados góticos y enfrentados entre sí que arrancan directamente desde el suelo.
las Atarazanas se convirtieron en un gran almacén, con patios interiores y viviendas; las nuevas naves, las carabelas, no cabían en el edificio.
Además, Fernando el Católico apostó por su abandono para potenciar las de Barcelona [11], sin embargo el Descubrimiento de América fomentó la reutilización del edificio En 1253 ya había diez galeras construidas y el rey Alfonso designó a diez capitanes o cómitres, algunos de ellos franceses e italianos que habían venido a colaborar en la Reconquista.
También eran un lugar natural para almacenar el botín y los prisioneros capturados por las flotas de los reyes castellanos.
Los reyes castellanos las utilizaron en las luchas por el control del estrecho de Gibraltar contra los musulmanes y también en incursiones contra Inglaterra durante la guerra de los Cien Años.
[17] En el primer tercio del siglo XV las Atarazanas armaron sus últimas grandes flotas de galeras.
Tras estas contiendas, los pedidos de los reyes castellanos se volvieron cada vez más escasos.
[3] A finales del siglo XV los Reyes Católicos instalaron la sede de su corte en Sevilla.
En esa nave se situaron varias lonjas de pescado y algunas viviendas.
[19] En 1587 la aduana de la ciudad se situó en las naves 13, 14 y 15, al sur del edificio.
En segundo lugar, las galeras fueron perdiendo capacidad de combate frente a diseños novedosos de veleros como la carabela, la carraca y la nao, que eran más rápidos y fuertes y tenían mucha mayor autonomía gracias a sus tripulaciones menos numerosas, pero su tamaño impedía que pudieran entrar en las naves de las Atarazanas.
Para la Corona además resultaba más ventajoso económicamente alquilar veleros privados a sus propietarios que construir y mantener flotas permanentes de galeras.
En la actualidad quedan en pie solo siete de las diecisiete naves originales.
[3] En 1719 el Gobierno dispuso que cinco naves pasasen a almacenar material de artillería.
En 1786 se terminó la construcción de un pabellón delantero, orientado hacia el oeste, que fue realizado por Francisco Jiménez Bonilla.
El rodaje se llevó a cabo en noviembre de 2016 para la séptima temporada.