Asesinato de Meredith Kercher

Los juicios de apelación tuvieron que repetirse, siendo celebrados en Florencia, donde los dos fueron condenados nuevamente en 2014.

[3]​ El veredicto señaló que como la evidencia científica era "central" para el caso, hubo "fallas de investigación sensacionales", "amnesia" y "omisiones culpables" por parte de las autoridades investigadoras.

Era conocida por sus amigos como "Mez" y vivía en el barrio londinense de Coulsdon.

Trabajando como camarera, guía turística y en promociones para mantenerse a sí misma, legando a hacer un cameo en el video musical de la canción de Kristian Leontiou Some Say en 2004.

Sus compañeros de estudios la describieron como cariñosa, inteligente, ingeniosa y popular.

La joven compartía un piso de cuatro dormitorios en la planta baja en una casa en la Via della Pergola, 7.

[9]​ El nivel inferior de la casa estaba ocupado por cuatro jóvenes italianos con quienes tanto Kercher como Knox eran amigos.

[10]​[11]​ También a mediados de octubre, Kercher y Knox asistieron al festival EuroChocolate.

Sollecito llamó a su hermana, teniente de los carabineros, para pedir consejo.

[24]​ El título que Kercher habría recibido fue otorgado póstumamente por la Universidad de Leeds en 2009.

A menos que el acusado opte por un juicio por la vía rápida, los casos de asesinato son examinados por un Corte d'assise.

[29]​[30]​ Los juicios italianos pueden durar muchos meses y tener largos intervalos entre audiencias; el primer juicio de Knox y Sollecito se escuchó dos días a la semana, durante tres semanas al mes.

Si esta revoca un veredicto, explica qué principios legales fueron violados por el tribunal de primera instancia, que a su vez debe acatar la sentencia al volver a juzgar el caso.

A mediados de 2007, su familia adoptiva le pidió que abandonara su hogar.

[45]​ Luego se fue de Italia a Alemania, donde estuvo ubicado en las semanas siguientes.

Le dijo al tribunal que había ido a Via della Pergola, 7 en una cita convenida con Kercher, después de conocerla la noche anterior.

[48]​[49]​ Guede dijo que Kercher lo había dejado entrar en el piso en torno a las 21 horas.

Guede dijo que escuchó a Kercher gritar mientras estaba en el baño, y que al salir, vio una figura en la sombra sosteniendo un cuchillo y parada sobre ella mientras yacía sangrando en el piso.

[57]​ Guede originalmente dijo que Knox no había estado en la escena del crimen, pero luego cambió su historia para decir que ella había estado en el apartamento en el momento del asesinato.

Un abogado que representaba a la familia Kercher protestó por la "reducción drástica" de la sentencia.

[64]​[65]​ Al describir el caso a sus colegas horas después del descubrimiento del cuerpo, la detective superintendente de Perugia Reparto volanti (Escuadrón Móvil), Monica Napoleoni, les dijo que el asesino definitivamente no era un ladrón y que los signos aparentes de un allanamiento se representaron como un engaño deliberado.

[74]​ Durante los siguientes cuatro días, Knox fue entrevistada repetidamente sin que se le permitiera acceder a un abogado.

Más tarde testificó que la policía la sometió a tácticas de presión y la golpeó para incriminarla.

Matteini ordenó la detención de Knox, Sollecito y Lumumba durante un año.

[83]​ Los cargos eran que Knox, Sollecito y Guede habían asesinado a Kercher en su habitación.

Según la fiscalía, Knox había atacado a Kercher en su habitación, golpeó repetidamente su cabeza contra la pared, le sujetó la cara con fuerza y trató de estrangularla.

Un fallo de que la prueba era insuficiente, similar al veredicto de no probado, estuvo a disposición del tribunal, pero el tribunal absolvió a Knox y Sollecito por completo.

[109]​[110]​[111]​[112]​ En lugar de simplemente declarar que ocurrieron errores en los casos judiciales anteriores o que las pruebas eran insuficientes para condenar, el tribunal dictaminó que Knox y Sollecito no habían cometido el asesinato y eran inocentes de esos cargos, pero confirmó la condena de Knox por difamar a Patrick Lumumba.

Primero, ninguna de las pruebas demostró que Knox o Sollecito estuvieran presentes en la escena del crimen.

En segundo lugar, no pueden haber "participado materialmente en el homicidio", ya que no se les pudo atribuir absolutamente ningún "rastro biológico [...] en la habitación del asesinato o en el cuerpo de la víctima, donde en contraste se encontraron numerosos rastros atribuibles a Guede".

Panorámica de la ciudad de Perugia.