Las características distintivas de la arquitectura mesoamericana reúnen numerosos estilos regionales e históricos que están significativamente interrelacionados.Ciertos datos sugieren que muchas particularidades de la arquitectura mesoamericana respondían a ideas religiosas y mitológicas.La parte sur representaba vida, sustento, renacimiento y por lo general contenía estructuras relacionadas con la continuidad y la función diaria de la ciudad estado, así como monumentos que delinean los linajes nobles así como barrios residenciales, mercados, etc. Entre las dos mitades del eje norte/sur se encontraba la plaza, la cual contiene a menudo estelas que semejan el Árbol del Mundo, axis mundi y un campo para el Juego de Pelota, que servía como cruce entre los dos mundos.Algunos estudiosos de la cultura mesoamericana opinan que en el simbolismo religioso asociado a la arquitectura, las pirámides eran montañas, las estelas representaban árboles, y los pozos y cenotes eran cuevas que daban acceso al inframundo.[8] Mientras que predominan las orientaciones solares, algunos edificios prominentes fueron alineados hacia los extremos de Venus,[9] siendo un ejemplo notable el Palacio del Gobernador en Uxmal.Mientras descubrimientos recientes apuntan al uso de las pirámides como monumentos fúnebres, los templos mismos raramente contienen entierros.Un palacio mayor, con muchos aposentos y niveles distintos, es a veces conocido como Acrópolis.Sin embargo, fuera de este enorme requerimiento, los materiales parecen haber estado al alcance.Este estilo predominó en la región norte del territorio maya durante el Preclásico y los inicios de la época Clásica.