A través de diferentes técnicas, la arqueología experimental intenta comprender las fases que emplearon los grupos humanos para realizar sus actividades; la recreación del uso y el modo de obtención de todo tipo de artefactos fabricados por el hombre permite desechar ideas o modificar teorías, razón por la cual se reconstruye experimentalmente esos objetos, usos y técnicas para luego se comparados con los objetos originales.La arqueología "clásica" se limita en esencia a los hechos del pasado que dejaron una huella o impacto incontestable.Los elementos como las técnicas que se utilizaron para producir un efecto determinado o la dureza de la vida de los hombres del pasado, que no lo hicieron, pueden esclarecerse por su reproducción a través de la experimentación.Es posible practicar la arqueología experimental con un gran presupuesto y grandes grupos de personas (habitualmente voluntarias) para la reconstrucción de grandes trabajos sin medios mecánicos modernos; o bien con un relativamente bajo presupuesto y en pequeños grupos, como en la talla lítica o la obtención de fuego.Otras prácticas exigen incluso el riesgo físico del experimentador (expedición de la Kon-tiki).