Armas de destrucción masiva en Argentina

En los Estados Unidos se han aislado varios virus sudamericanos de fiebres hemorrágicas con condiciones para ser usado como arma biológica, entre ellos el virus Junín, cuya potencialidad está dada por la alta mortalidad, morbilidad, facilidad de contagio usando aerosoles, y antídoto curativo, y vacuna preventiva.

En noviembre de 1983, funcionarios gubernamentales confirmaron que el reactor del Instituto Balseiro tenía capacidad para enriquecer uranio a niveles armamentísticos.

[4]​ Sin embargo, el programa fue abandonado tras el retorno de la democracia al país.

[5]​[6]​[7]​ Poseía una capacidad para transportar una carga bélica de 500 kilogramos a una distancia estimada entre los 800 y 1000 kilómetros.

El proyecto fue desmantelado por presiones internacionales, durante la presidencia de Carlos Menem.

Prototipos del Cóndor II en distintas fases de desarrollo.